¿Por qué no consigo producir más? ¿Por qué mi negocio no es más rentable? Sin lugar a duda estas preguntas ya han pasado por la mente de todos aquellos que producen cerdos. Creemos que las respuestas para cada una de ellas están en la forma de encarar la productividad de su granja.
Identificar problemas exige dejar de lado una visión más operativa de la finca, centrada en detalles aislados – cubriciones, partos, destete, alimentación, vacunación. Vista como un negocio, la granja debe ser analizada por completo considerando el proceso productivo como un todo. Al hacerlo, se plantea la pregunta: ¿por dónde empezar?
La información es esencial
Cuando usted consulta un médico, por ejemplo, debido a un dolor corporal, sabe que le pedirá que haga una serie de exámenes. Sin información suficiente, las posibilidades de diagnosticar correctamente y el propio tratamiento se reducen al mínimo.
Lo mismo ocurre con la granja. Para rastrear un problema es necesario tener información confiable y sistematizada sobre la producción. En la infografía a continuación se muestra la información clave para llevar a cabo un diagnóstico real de la granja.
El análisis en forma de árbol permite ver la granja con una perspectiva amplia y, al mismo tiempo, identificar el punto más crítico que se debe priorizar. Esto significa que, a pesar de la gran cantidad de indicadores monitoreados, es posible y necesario identificar los que generan mayor impacto sobre la productividad, poniendo el punto de mira en las mejoras que realmente traerán resultados efectivos. Por ejemplo, si el índice de destetados por hembra al año (DHA) está por debajo de la meta, el problema radica en la frecuencia con que las hembras están pariendo o en el promedio de cada destete.
He identificado los problemas. ¿Y ahora, qué hacer?
Al interpretar la información sobre la producción, usted será capaz de identificar los cuellos de botella que impiden que su granja sea mejor. Si son varios, no se desanime. Lo más importante es priorizar la solución de los que tienen mayor impacto en la productividad y, por consiguiente, en el rendimiento económico del negocio. En todo ese proceso no olvide involucrar y capacitar a su equipo. Cuanto mayor sea el número de personas que entienden los problemas y las propuestas de solución, mayores serán las posibilidades de que se conviertan en agentes de cambio.
Fuente: Agriness
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