En diálogo con Infopork Larry Bartolni, Presidente de la Asociación Cordobesa de Productores Porcinos Magros, señaló que en las últimas semanas registraron mayores niveles de comprar por parte de los frigoríficos. Al inicio de la cuarentena, preocupó al sector la disminución del 30% sobre la demanda de carne fresca, la que en frigoríficos de capital llegó a ser del 50%. “Estas semanas la tendencia fue distinta y tenemos un poco menos de compras, pero nunca un 30% menos como tuvimos al inicio de la cuarentena”, señaló el dirigente.
Hasta el momento no logran comprender los motivos de la retracción, según analizaron desde esta entidad, se supone que ante el primer decreto de aislamiento las personas tendieron a acopiar gran cantidad de alimentos y eligieron la carne de vaca y pollo. Esto puede haber generado por un lado que consuman menos cerdo y por otro que durante varios días no repusieran. Ahora las compras se normalizaron más, la gente ya no compra a modo de acopio sino de manera más cotidiana.
Sin éxito las propuestas del sector
Hace una semana la entidad presentó al Gobierno de la Provincia de Córdoba un plan para que las granjas porcinas puedan ofrecer cerdos en el mercado a un precio promocional, de modo de colocar stock de carne y al mismo tiempo brindar una ayuda económica a los sectores vulnerables en medio de la pandemia. La propuesta fue presentada pero no tuvo avance, estiman porque podía generar un conflicto con los actuales canales de comercialización de carne fresca.
La Cámara de Productores Porcinos de Córdoba también generó una propuesta solidaria para sus asociados, que permitía mediante una cuota única y solidaria colocar dinero a disposición del Banco de Alimentos de la Provincia. Este dinero debía ser utilizado para la compra de carne porcina en determinados frigoríficos a un precio menor al comercial. Según pudo conocer este medio no tuvo gran aceptación en los asociados.
