Se celebró la sexta edición de CHACINAR, organizada por el Clúster Porcino de Tandil en colaboración con la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires y el Municipio. Con un enfoque innovador, el evento comenzó el viernes con una Jornada Técnica en el Centro Cultural Universitario, que reunió a profesionales, estudiantes, representantes del sector y autoridades locales y provinciales. El sábado, el Festival del Salame y el Cerdo tuvo como objetivo alcanzar el récord del salame más largo del mundo.
La Jornada Técnica se destacó por abordar temas que van más allá de la agenda habitual, incluyendo discusiones sobre medio ambiente, sustentabilidad, producción, y las características del salame de origen tandilense, además de incorporar por primera vez el enfoque de género.
“Por sexto año consecutivo organizamos la feria de CHACINAR, que siempre complementamos con una Jornada Técnica previa. Desde el Clúster, realizamos un fuerte trabajo territorial y en CHACINAR mostramos la integración y los resultados de un año de esfuerzo, abarcando desde aspectos técnicos hasta la producción diaria y el salame con denominación de origen de Tandil”, explicó Fabián Amanto, uno de los fundadores de CHACINAR y docente de la UNICEN.
Este evento se convierte en una vitrina donde la comunidad de Tandil y la región pueden conocer el funcionamiento de cada eslabón de la cadena productiva, desde la cría de cerdos hasta las distintas variedades de productos procesados. En Tandil se producen más de 50 variedades de chacinados y fiambres, así como más de 20 tipos de salames. Victoria De Estrada, coordinadora del Clúster Porcino, destacó que la producción porcina es un motor económico para Tandil, generando empleo directo e indirecto y aportando valor desde la producción.
Los números hablan por sí mismos: para procesar 1.000 toneladas de carne de cerdo se requieren 56 personas, y para elaborar 1.000 toneladas de embutido artesanal, se necesitan 296. En comparación, solo se requiere una persona para producir 1.000 toneladas de maíz. Esta diferencia pone de relieve la importancia de la industria del chacinado en la región. Tandil cuenta con 2.500 hectáreas de maíz y 3.500 hectáreas de soja, que alimentan a más de 100.000 cerdos al año. Se envían 2.000 cerdos a faena semanalmente, produciendo 11.000 toneladas de carne y 12.000 toneladas de fiambres y embutidos al año, destinados tanto al consumo local como a mercados internacionales, como Perú, Paraguay, Rusia y China, generando 1.100 empleos directos.
CHACINAR demuestra cómo el trabajo conjunto entre la universidad, el municipio y el sector privado puede resultar en una integración virtuosa, impulsando el desarrollo regional a través de la actividad porcina.
