El sector porcino de Santa Fe se fortalece: inversiones, exportaciones y un 2025 prometedor

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escrito por Redacción Infopork

El sector porcino en Santa Fe cerró el 2024 con un balance positivo y expectativas de crecimiento para el 2025. Pese a un primer semestre marcado por dificultades, la recuperación en la segunda mitad del año permitió a los productores proyectar inversiones, ampliar mercados y consolidar su competitividad.

Según la Asociación de Productores Porcinos de Santa Fe (Apporsafe), la apertura de importaciones impulsada por el gobierno de Javier Milei no tuvo el impacto esperado, mientras que la eliminación de retenciones y el Impuesto País favorecieron la expansión del sector.

Javier Brunet, gerente de Apporsafe, destacó que la segunda mitad del 2024 trajo consigo una recuperación en el valor del kilo en pie, lo que alivió a los productores. “El año pasado, en el primer semestre, hubo una disminución de pequeños y medianos productores, los más expuestos a la inestabilidad económica. Pero se cierra el 2024 con una sensación mucho más positiva”, afirmó.

El crecimiento del sector se sustentó principalmente en la reinversión de medianos y grandes productores, quienes ampliaron sus granjas y avanzaron en modelos de producción integrada. “Los pequeños productores que cerraron sus granjas están ingresando a sistemas de crianza compartida, lo que les permite seguir en actividad bajo nuevas modalidades”, explicó Brunet.

Respecto a las últimas medidas del gobierno nacional como la eliminación de derechos de exportación y la reducción de retenciones, Brunet expresó que tiene efectos mixtos. “Lo positivo es que la cadena de valor está más consolidada y esto nos permite mejorar nuestra presencia en los mercados internacionales”, señaló.

El sudeste asiático se presenta como un destino clave, con países como Singapur, Vietnam y China interesados ​​en la carne argentina, gracias a sus altos estándares sanitarios. A esto se suma una reactivación de inversiones en infraestructura y tecnología, favorecida por la baja en los precios de insumos importados.

Importaciones y competitividad del mercado interno

Uno de los principales temores del sector era el impacto de la apertura de importaciones, sobre todo desde Brasil. Sin embargo, Brunet aseguró que “viendo los números, no tuvo el impacto que se esperaba y el productor argentino está mucho mejor parado”.

Si bien hubo ingresos de productos importados, el volumen fue menor al previsto. “El miedo era que la importación de bondiola y solomillo brasileños generara una quietud en la relación entre productores y frigoríficos, como ocurrió en años anteriores. Sin embargo, la carne argentina sigue consolidándose, manteniendo su competitividad en calidad y sanidad”, sostuvo.

La baja de retenciones también tiene su impacto en los costos internos, particularmente en la soja, que representa el 20% de la alimentación porcina. “No es un golpe significativo, pero obliga a recalcular costos y ser más estratégicos en la gestión de gastos”, advirtió Brunet.

Este 2025, el sector se enfocará en fortalecer el mercado interno y captar parte de la demanda que pierde la carne vacuna. “El desafío será mantener el crecimiento cuando baje el consumo después del verano, pero seguimos con un horizonte optimista”, concluyó el referente de Apporsafe.

Fuente: Aire de Santa Fe

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