Las exportaciones de cortes vacunos se redujeron un 19% y las ventas globales de carne de pollo un 3,9%. Los países europeos y asiáticos redujeron sus compras por la crisis global.
Brasil, el mayor productor y exportador mundial de carne bovina y de pollo, redujo la faena de animales en el primer trimestre de este año como consecuencia de la caída de la demanda por la crisis global, según un estudio divulgado por el gobierno brasileño.
Brasil sacrificó en los tres primeros meses de este año 6,44 millones de cabezas de ganado, una cifra 11,1 por ciento inferior al del mismo período de 2008 y 3,6 por ciento menor que el del último trimestre del año pasado, según datos del estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (Ibge).
En los tres primeros meses del año, Brasil faenó 1,12 millón de pollos, un 5,8 por ciento menos que durante el mismo período de 2008 y 10,8 por ciento menos al del cuarto trimestre del año pasado.
Las causas
La reducción en el sacrificio tanto de bovinos como de pollos reflejó principalmente la caída de las ventas de carne al exterior por la crisis. Según la secretaría de Comercio Exterior, las exportaciones brasileñas de carne bovina se redujeron en volumen 19 por ciento en el primer trimestre de este año, frente al mismo período del año pasado. En valores, los envíos cayeron 34,1 por ciento en la misma comparación.
Por su parte, el volumen de las exportaciones de carne de pollo cayeron 3,9 por ciento en el primer trimestre frente al mismo período del año pasado y 21,9 por ciento en valores.
“La recesión de la economía mundial no permite aún una recuperación del crecimiento de esta actividad (producción de carne bovina), que está en fase de adaptación a la nueva realidad, lo que afecta los negocios en el ámbito interno y externo”, según el comunicado del Instituto.
En cuanto al pollo, el organismo aclaró que, como consecuencia de la crisis, algunos importantes compradores como la Unión Europea, Estados Unidos y Rusia redujeron las compras, lo que obligó a buscar nuevos mercados y a aumentar sus ventas a Hong Kong y Oriente Medio.
En contrapartida, y pese al temor de que la gripe H1N1 provocara una reducción del consumo de carne porcina, el sacrificio de cerdos en los tres primeros meses del año subió a 7,32 millones, 7,1 por ciento más que en 2008.
Pese al temor de que la gripe H1N1 provocara una reducción del consumo de carne porcina, el sacrificio de cerdos subió un 7,1 % más que en 2008.
Coletazos de la crisis. En el primer trimestre de este año, Brasil faenó un 11,1 % menos de reses vacunas que en el mismo periodo del año pasado.
Un estudio de los equipos técnicos de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) analizó los efectos que el nuevo peso mínimo de faena puede tener sobre la golpeada cadena ganadera. Hay que recordar que a partir del 1 de julio comenzarán a regir los 280 kg por cabeza como peso mínimo de faena, según dicta la resolución 42/2009.
Los especialistas de CRA aseguran que las consecuencias de esta medida sobre los productores ganaderos de cría pueden ser demoledores dada la situación de quebranto económico por la que atraviesan, sumado a los efectos del clima adverso de los últimos años y la llegada del invierno.
Entre los efectos más perversos se puede considerar la caída en el precio del ternero —ya deprimido— debido a que los que demandan los terneros (invernadores y feedlots) trasladarán el costo adicional de tener que llevar el peso de la hacienda a por lo menos 280 kg vivo para no ser multados.
El estudio de CRA insiste en que es necesario suspender esta resolución. “Hay que considerar la situación por la que atraviesan miles de pequeños y medianos productores ganaderos”, explican.
No hay que olvidar —explican los técnicos de CRA— que los productores ganaderos de cría vienen enfrentando pérdidas económicas por los “magros precios”, condiciones climáticas adversas por la “feroz sequía”, crítica falta de pasturas (muchos verdeos de invierno no se pudieron sembrar) y encima los ganaderos están atravesando los meses más difíciles del año para alimentar a los rodeos.
