La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, aseguró hoy
a representantes del sector que la los ahorros obtenidos por el recorte
de ayudas directas que propone en la reforma de la Política Agrícola
Común (PAC) van a quedarse en el campo, para otras medidas de desarrollo
rural.
Fischer Boel participó en el debate organizado por la Comisión Europea
(CE) sobre el proyecto de revisión de la PAC, que entre otras ideas
plantea una rebaja de los pagos agrícolas directos, para trasvasar ese
dinero a las políticas de desarrollo rural.
La responsable agrícola del Ejecutivo comunitario reafirmó sus
intenciones de aplicar esa rebaja, que según la propuesta será superior para
los grandes propietarios, es decir, aquellos que perciben subvenciones de
más de 100.000 euros anuales.
Asimismo, insistió en otros aspectos de la reforma, como el final de
las cuotas lecheras en 2015 o la eliminación de la mayor parte de las
ayudas a los cereales que se dan a través de la intervención o de los
precios del mercado.
La revisión o el llamado "chequeo médico" de la PAC prevé el incremento
de lo que se conoce como "modulación", es decir, una reducción de los
pagos directos cuyo fin es reforzar el desarrollo rural (medidas en el
campo complementarias o distintas a la agricultura) y que ahora se
aplica al 5% de las primas.
La CE quiere elevar ese porcentaje gradualmente, de manera que en 2013
el recorte sea del 13%, para potenciar medidas contra el cambio
climático, en beneficio de pastos o incluso para regiones de montaña, añadió.
La comisaria respondió a críticas como las de la organización que
agrupa a los agricultores europeos (Copa-Cogeca), quienes afirmaron que la
reforma va a ser "dolorosa" para muchos productores, según el presidente
de la Cogeca (cooperativas), Donal Cashman.
La Copa-Cogeca aludió al reciente informe del Tribunal de Cuentas de la
UE, según el cual la actual PAC y su potenciación del desarrollo rural
beneficia a campos de golf.