El domingo, la Oncca aclaró mediante un comunicado que la semana pasada autorizó la exportación de 675.011 toneladas de trigo, un volumen que, según esa oficina, supera las 95.000 toneladas de los permisos pedidos en las primeras tres semanas de noviembre. Seguidamente, el organismo afirmó que "el Registro de Exportación siempre estuvo abierto, pero los operadores no exportaban porque especulaban".
El economista de la Sociedad Rural, Ernesto Ambrosetti, refutó a la Oncca y dijo que el mercado sigue intervenido. "La exportación no es libre. Depende de que uno salga vivo del triángulo de las Bermudas que conforman los permisos de la Oncca, Comercio Interior y la Aduana, un lugar donde cualquier intención de exportar desaparece", dijo.
En la industria exportadora también refutaron a la Oncca y uno de sus altos ejecutivos dijo que "la exportación funciona por cupos y ellos liberan los tonelajes que quieren. Si no se cubren los cupos es por las trabas que el Gobierno agregó a la venta, no por especulación".
