La OIE ha informado de la aparición de peste porcina africana (PPA) en
Rusia, enfermedad altamente contagiosa que a menudo es mortal para los
porcinos y para la cual hasta el momento no existe una vacuna o
medicamento que pueda combatirla o prevenirla. La enfermedad se ha detectado
en una manada de jabalís en la República de Chechenia, que atraviesan
libremente la pradera subalpina a lo largo de los ríos Argoun y
Shatoy-Argoun, los cuales recorren 30 a 40 km en territorio de Georgia, país en
el que, junto con Armenia, la enfermedad se ha propagado de forma muy
rápida durante los últimos meses y cuya introducción del virus en estos
países caucásicos se debió probablemente, según la FAO, a residuos sin
tratar de buques mercantes que transportaban productos cárnicos
contaminados.
La aparición de la PPA en Rusia se debe a la migración transfronteriza
de jabalís. Las autoridades rusas están intensificando las medidas de
bioseguridad en las explotaciones porcinas y están restringiendo los
movimientos en el interior del país.
La FAO ya anunció el pasado mes de octubre que la propagación del virus
de la peste porcina africana por la región del Cáucaso suponía un
grave problema de sanidad animal y podría llevar a una situación dramática
y que de no implementar una estrategia más eficaz de vigilancia y
control de la enfermedad el virus podía hacerse endémico en el Cáucaso y
abrirse camino desde allí a otras regiones como la Unión Europea, Rusia o
Ucrania.
