En el marco del programa de Acción Mercosur Libre de Aftosa, el Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria de Argentina recibió 191.000 dólares para la compra de equipamiento e insumos para la capacitación de los agentes del organismo. Aunque la partida se maneja en el vecino país, se la emplea en el plan de erradicación de la enfermedad a nivel regional y ello hace partícipe a Uruguay de la iniciativa proveniente del Fondo de Convergencia Estratégica del Mercosur (Focem).
La partida recibida corresponde al período setiembre-diciembre de este año. En dicho Fondo los socios mayores hacen los más grandes aportes a efectos de abatir, al menos en parte, las asimetrías naturales entre éstos y los socios menores.
Para 2008, en el marco del Plan Operativo Anual, el Senasa recibirá del Programa otros 900.000 dólares, que se aplicarán en actividades de capacitación, auditorías y misiones regionales entre los países vecinos. El porcentaje uruguayo, en esta participación, es importante.
El Programa tiene como objetivo apoyar la erradicación de la fiebre aftosa en el ámbito del Mercosur y los Estados asociados. La agencia ejecutora es el Comité Mercosur Libre de Fiebre Aftosa (CMA). El plazo de ejecución del proyecto es de cinco años y su financiación se realiza a través del Focem con una contribución total de alrededor de 14 millones de dólares, no reembolsables.
Hacia lo externo, la erradicación de la aftosa podría significar la confirmación del estatus «libre de aftosa sin vacunación», que la Organización Internacional de Epizootias (OIE) confirió a Uruguay en enero. Pero debe tenerse en cuenta que las declaraciones de un determinado estatus sanitario por parte de la OIE no son vinculantes. La aceptación de dicho estatus tiene que ser convalidada en forma bilateral por los países compradores.
En este sentido, desde mayo pasado ningún país había aceptado oficialmente dicho estatus. En efecto, ni Estados Unidos ni la Unión Europea, han reconocido aún el estatus otorgado por la OIE. Uruguay venderá, por ahora, como país libre de aftosa con vacunación.
Considerándolo en perspectiva económica, las exportaciones de carne al Nafta representan unos U$S 145 millones, es decir, un 11% del total de los agroalimentos uruguayos que van a esa región. Como el estatus reconocido es «libre con vacunación», no debería haber problemas en los montos.
Más cerca de Uruguay, los costos frente a los países de la región están más por el lado político que económico. Un reciente acuerdo bilateral por el que se detienen las exportaciones de carne con hueso y de animales a Brasil representa un porcentaje mínimo frente a un total de U$S 43.3 millones de exportaciones de carnes y U$S 2.162 millones de agroalimentación en general.
