Porcicultores franceses han estado protestando contra el mercado del cerdo Breton en Plérin, la autoridad que fija el precio de la carne de cerdo francesa dos veces por semana. Esto ha desembocado en una especie de crisis, con los agricultores diciendo que están pagando demasiados cargos, y los precios fijados son demasiado bajos.
¿Cuál es exactamente el problema aquí?
"El problema que tienen los criadores de cerdos es que el precio de venta no es simplemente suficiente para cubrir los costos de producción", dijo Thierry Coué, el jefe de la sección de Bretaña de la asociación nacional de agricultores.
Los agricultores argumentan que pagan demasiados cargos que hace que su cerdo más caro que otros productores de la Unión Europea grandes, como Alemania y España.
Debido a esto, dos de los mayores compradores de carne de cerdo de Francia han decidido boicotear el mercado del cerdo Breton esta semana, diciendo que los agricultores están pidiendo demasiado dinero.
El mercado está en Plérin, una pequeña ciudad en la región occidental de Bretaña. ¿Por que es tan importante?
Francia representa más del 10 por ciento de la producción de carne de cerdo de la UE. Más de dos tercios de los 13 millones de cerdos del país están en Bretaña – es por eso que el mercado se encuentra en esta región.
Funciona como una típica bolsa: dos veces a la semana, los vendedores y los compradores deciden sobre el precio de un kilo de carne de cerdo, que se refleja luego en el plano nacional.
Entonces, ¿por qué están tan molestos los agricultores?
Bueno, hace unos meses, como explica Le Monde, un kilo de carne de cerdo tenía un precio de alrededor de 1 euro y 20 céntimos, aunque cuesta un promedio de 1,55 euros para producir.
Hay varias razones para ello, incluyendo el embargo ruso sobre los productos europeos y una disminución del consumo en Francia.
"Hay dos problemas", explica Thierry Coué. "La primera es en el nivel de francés, con la acumulación de nuevas regulaciones en la última década. También hay un problema europeo. Tenemos una moneda común, pero a pesar de eso, hay una competencia desleal cuando se trata de los salarios y de la salud y las obligaciones sociales. no podemos luchar, porque nuestros costos de producción son mucho más altos que nuestros competidores alemanes o españoles ".
El gobierno se ha hecho participe de la situación. ¿Qué está haciendo ahora?
Esta crisis no es nueva. En junio, el gobierno, los agricultores y los grandes minoristas accedieron a bajar los precios de la carne progresivamente. Las autoridades francesas también se comprometieron a inyectar 600.000 euros de ayuda en el momento.
El 6 de agosto, un kilo de carne de cerdo valía 1,40 euros. Sin embargo, para los agricultores que todavía no es suficiente.
La ministra de Agricultura francesa, Stéphane Le Foll dio una conferencia de prensa sobre el tema el jueves.
"Todo el mundo es responsable", dijo Le Foll. "No habrá solución si, en conjunto, no somos capaces de tener un enfoque global sobre la fijación de precios, la organización del sector, y sobre los principales desafíos a nivel europeo y mundial."
También se comprometió a reunirse con el presidente de COPEA, la asociación nacional de actividades de cooperación, y el jefe de la compañía francesa de procesamiento de carne Groupe Bigard en la próxima semana.
¿Existe una solución?
Una mesa redonda será organizado por el Ministerio de Agricultura el lunes. Pero Coué duda de nada que algo cambie.
"Si se toman medidas con el fin de reducir nuestros costos, entonces es genial", argumenta. "Si es una vez más otra mesa redonda para hablar de la situación actual … así que ya hemos hecho eso. Por eso queremos una acción fuerte para que podamos volver a nuestros pies. En este momento estamos agotados. Tenemos que ser capaces para dar visibilidad a los agricultores ".
La mayoría de los expertos también dudan de que una solución será encontrada rápidamente. La industria porcina de Francia – y sus agricultores en general – han estado luchando durante años debido a los grandes retos estructurales.
Las principales mataderos han cerrado en el último par de años y la tendencia no parece estar invirtiéndose.
