Ayer, en una jornada en que el Merval bajó 1,4 por ciento y cerró enero con una pérdida del 6,7 por ciento, el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) informó que las commodities agrícolas estuvieron entre las mejores inversiones del mes.
Los negocios con el trigo (cuyo precio saltó con la reapertura del registro de exportación) dejaron ganancias de más de 22 por ciento, los del girasol, 19 por ciento, los de la soja, 12 por ciento, y los del maíz, 9,3 por ciento.
En Rosario, la soja cotizó a 1.060 pesos la tonelada para descarga inmediata y las ofertas de fábricas y exportadores treparon hasta 304/305 dólares para la oleaginosa a entregar en mayo.
Las noticias siguen favoreciendo al principal cultivo de la Argentina. En el estado de Matto Grosso, principal productor de soja de Brasil, ya se vendió el 60 por ciento de la cosecha esperada, contra 40 por ciento a la misma altura de 2007. En parte, la demanda está empujada por la entrada en vigencia de una ley que obliga a usar al menos dos por ciento de diesel de origen vegetal en los motores diesel.
En Estados Unidos, principal productor y exportador mundial de soja, temen incluso que una sequía lleve los precios más arriba. De todos modos, Craig Ratajczyk, director del Consejo de Exportación de la Soja de ese país, advirtió ayer a The Wall Street Journal que el mercado estará caracterizado por "giros salvajes". De hecho, en Chicago, los cereales recuperaron ayer parte de la pérdida del día anterior.
Pero no es sólo soja
En Rosario, el maíz para exportación de entrega inmediata se pagó ayer 470 pesos la tonelada, aunque los futuros para marzo/abril bajaron a 152 dólares.
La exuberancia de las noticias hizo que hasta la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y la Pampa (Carbap, uno de los grupos más combativos de CRA), expresara "satisfacción" por la reapertura de los registros de exportación de trigo y maíz, que juzgó como una señal de "comprensión" oficial.
La cadena comercial del girasol, nucleada en Asagir, estimó a su vez que la cosecha de la oleaginosa rondará los 4,2 millones de toneladas y que los precios se mantendrán firmes hasta setiembre. Entre otros motivos, porque todos los grandes productores mundiales produjeron menos en la reciente campaña: 17 por ciento Rusia, 24 por ciento Ucrania y 30 la Unión Europea.
También ayer, la secretaría de Agricultura informó que los pagos de "compensaciones" al sector agroalimentario para que no transmita al mercado interno la suba plena de los precios internacionales, ya superó los 1.089 millones de pesos.
Es que todo llega con filtro fiscal. Néstor Roulet, vicepresidente de CRA, calculó recientemente que entre 2004 y 2007 el ingreso del "stado a partir del negocio sojero aumentó 98 por ciento (algo que se notará en el récord histórico de recaudación que anunciará hoy la Afip), los costos lo hicieron 85 por ciento y el ingreso neto del productor apenas seis por ciento. Por ahora, los precios bancan todo.
