Exigen política comercial espejo con EU y Canadá
La Confederación de Porcicultores Mexicanos apremió a los secretarios de Agricultura (Sagarpa), Alberto Cárdenas Jiménez, y de Economía, Eduardo Sojo, a instaurar a la brevedad una salvaguarda para detener la quiebra y el cierre de un mayor número de granjas, ya que el incremento de los precios internacionales de maíz y sorgo elevó los costos de producción.
Insistieron en la adopción de acciones inmediatas de salvaguarda para la porcicultura, sector que contabiliza pérdidas por casi 2 mil millones de pesos, monto que podría incrementarse este año. El riesgo es tal, que productores en Tamaulipas y otras entidades, que tienen 3 mil 500 cabezas, están a punto de cerrar.
En la reunión que sostuvieron el pasado fin de semana con los titulares de Sagarpa y Economía, integrantes de la Confepor, encabezados por Vicente García Vázquez, asentaron que los apoyos son un paliativo, lo que hace falta es una política espejo con los socios comerciales del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que incluya, entre otros aspectos, etiquetar los productos importados para consumo humano, aumentar la verificación en la frontera y terminar con las prácticas desleales.
García Vázquez asentó que las importaciones bajo prácticas desleales “han asestado un fuerte golpe a la porcicultura nacional. En la última década, los volúmenes de carne de cerdo procedentes del exterior crecieron mil 600 por ciento. El gobierno debe reconocer que el cerdo es un transformador de granos, principalmente de origen nacional, pero está accediendo a ellos a precios 40 por ciento más elevados que el competidor estadunidense.”
Recordó que entre México y Estados Unidos hay una estructura comercial diferenciada por los tipos de cortes: las piernas y espaldilla provenientes del socio comercial se ofertan hasta 50 por ciento abajo de los precios en el mercado nacional, diferencia que sólo favorece a importadores.
El dirigente de la Confepor reconoció los apoyos otorgados por Sagarpa, pero aclaró que para incorporar 40 mil vientres a la producción nacional, como es la meta del programa para la porcicultura, se requiere asegurar la viabilidad económica de los productores. Fuente: La Jornada
