La Secretaría de Salud y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Dirección General de Normas de la Secretaría de Economía de México están trabajando en conjunto con el Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne) para refinar la reglamentación de etiquetas para los productos cárnicos.
El objetivo es ofrecer una mejor información al consumidor sobre el producto por medio de la etiqueta que aparece en su envase, y evitar la mala interpretación de información o "leyendas engañosas".
Comecarne está pidiendo que se le permita a los empacadores y procesadores de carne el uso de información sobre los beneficios del producto, así como sugerencias al consumidor para su estilo de vida (p. ej. bajo en grasa, bajo en calorías, etc.), así como incluir aquellos atributos del producto que mejoren la salud del consumidor (alimentos con ingredientes funcionales) y presentarlos bajo las leyendas: "Bueno para la salud", "bueno para la digestión", "enriquecido", leyendas que en otros países se usan en las etiquetas cuando el producto en cuestión contiene ingredientes funcionales como los ácidos grasos omega 3, vitaminas, probióticos, fibra, etc.
