BRASIL. Informe alerta sobre expansión del agrocombustible

Foto del autor

escrito por Redacción Infopork

Calificado como una de las principales alternativas para disminuir la contaminación ambiental producida por las actuales fuentes de energía, el beneficio de esa energía "renovable" esconde que la expansión de monocultivos para esa producción destruirá florestas, causando mayor emisión de gas carbónico hacia la atmósfera.
Según el Informe, las organizaciones ambientalistas alertan que la expansión de monocultivos en áreas de florestas representa un riesgo mucho mayor para el calentamiento global que las emisiones de carbono provenientes de combustibles fósiles.

El gobierno federal estima que 90 millones de hectáreas de tierras brasileras podrían ser utilizadas para esa producción, de los cuales 70 millones se realizarían sólo en la Amazonia, para cultivar dendê (aceite de palma). Experiencias extranjeras muestran que la producción de dendê, conocido como "diesel de la deforestación", ya causó la devastación de grandes extensiones de florestas en Colombia, Ecuador e Indonesia. En Malasia, el mayor país productor de aceite de palma del mundo, el 87% de las florestas no existen más.

En Brasil, la caña de azúcar es una de las mayores apuestas del gobierno para ser transformada en biocombustible. Pero el impacto sobre el suelo y las fuentes de agua potable es una preocupación, pues el cultivo y el procesamiento de la caña, además de necesita gran cuantidad de agua -cada litro de etanol producido dentro del ingenio, en circuito cerrado, consume cerca de 12 litros de agua-, porque se utilizan productos químicos.

Cada litro de etanol producido a partir de caña de azúcar genera de 10 a 13 litros de viñote, esa sustancia contamina ríos y fuentes de agua subterráneas. Como anualmente se produce en Brasil 17.000 millones de litros de etanol de caña, por lo menos 170.000 millones de litros de viñote son depositados en las regiones de los cañaverales. Además, la quema de la caña, para facilitar su recolección, destruye gran parte de los microorganismos del suelo, contamina el aire y causa enfermedades respiratorias.

De acuerdo con el Informe, el etanol generado a partir del maíz presenta una grave amenaza a la soberanía alimentaria, pues ese es uno de los principales granos que forman la base de la alimentación humana. El gobierno estadounidense pretende alcanzar una producción anual de 132.000 millones de litros de etanol hasta 2017.

Para ello, es necesario utilizar toda su actual producción (268 millones de toneladas de maíz) y aún así necesitarían importar cerca de 110 millones de toneladas -lo que equivale al total de la producción anual de maíz de Brasil.

En 2006, el precio del maíz en el mercado mundial tuvo un aumento del 80%. La búsqueda de alternativas al maíz que está convirtiéndose en combustible hace también que otros productos tengan aumento de precio. Los precios del trigo y del arroz ya subieron.

La suba del precio del maíz va a afectar también el costo de la cría de aves, bovinos y porcinos, pues representa el 75% de todos los granos utilizados en la ración animal.

El documento presentado hoy dice que, de acuerdo con el Instituto Internacional de Pesquisa sobre Políticas de Alimentación (International Food Policy Research Institute), el precio de los alimentos puede subir del 20 al 33% hasta 2010 y del 26 al 135% hasta 2020, en el caso que se mantenga la actual expansión de la producción de agrocombustibles.

Según la FAO, actualmente cerca de 854 millones de personas no tienen acceso a la alimentación adecuada y ese número puede subir a 1.200 millones como consecuencia del aumento del precio de los alimentos.

 

Please follow and like us:
Pin Share

Palabras Clave:

Categorias:

Foto del autor

escrito por Redacción Infopork

Deja un comentario

Sitio protegido por Google reCAPTCHA. Ver políticas de privacidad y términos de servicio.

RSS
Follow by Email
Twitter
Visit Us