El Dr. Brian Mark (Decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Manitoba) y la Dra. Marjolein Kickert (Profesora asociada de Virología de la Universidad de Leiden) hicieron el descubrimiento mientras estudiaban una proteína producida por un virus que suprime la inmunidad de los cerdos y provoca enfermedades graves. Señalaron que cambiar la estructura de esta proteína permitiría la creación de cepas modificadas del virus, que a su vez podrían formar la base de nuevas vacunas.
«Lo que descubrimos es exclusivo de la biología del virus», dijo Mark. Según explicaron en medios de comunicación locales «La información obtenida de nuestros estudios, que proporciona información sobre la biología de cómo funcionan estas familias de virus en su conjunto, podría ayudar a contribuir a la creación de vacunas contra todos los virus dentro de esa familia».
Proteínas y ADN
En una nueva investigación en la revista Frontiers in Immunology, un equipo de científicos en China Sugiere que muchas proteínas del huésped no sólo participan activamente en interacciones complejas con proteínas virales en la progresión de la enfermedad de PRRS, sino que también desempeñan un papel fundamental en la respuesta del huésped a la infección por PRRSv.
«Si la interacción del huésped del PRRSV a nivel de proteína se conceptualiza como la primera línea de la batalla entre los patógenos y las células huésped, luchar contra ellos a nivel de ARN es como una primera línea oculta».
El descubrimiento de Mark y Kickert es otro ejemplo de lo que estos científicos chinos describen como «el progreso significativo realizado en los últimos años hacia la comprensión de la patogénesis de la infección por PRRSv y la respuesta del huésped».
Desarrollo de vacunas
Las vacunas contra el PRRS han existido durante la mayor parte de la última década. Algunas análisis empresariales sobre el Mercado mundial de vacunas contra el PRRS han valorado las mismas en 342 millones de dólares en 2023, con un mercado esperado de 677 millones de dólares para 2030.
En un nuevo estudio genético del PRRSv realizado por un equipo de Nepal, China y el Reino Unido, los científicos señalan que una herramienta importante para aumentar la eficacia de la vacuna y mejorar las pruebas de diagnóstico es monitorear y genotipar las formas circulantes del virus en todo el mundo.
Explican que «el control del PRRSv es… muy desafiante debido a la alta variabilidad genética del virus».
Fuente: Pig Progress
