El mercado chileno ha abierto sus puertas a la importación de tripas saladas porcinas procedentes de Colombia, tras la aprobación del Servicio Agrícola y Ganadero de Chile (SAG). Esta medida es el resultado de una exhaustiva inspección sanitaria realizada por el ente chileno en mayo de este año a los establecimientos colombianos, según informó el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA).
La gerente general del ICA, Paula Cepeda, resaltó que este nuevo logro permitirá que Colombia llegue a un total de 19 mercados con sus productos agropecuarios en lo que va del año, contribuyendo a la diversificación de las exportaciones y al crecimiento de la industria porcina. «Esta admisibilidad refuerza las nuevas oportunidades para nuestros productores, impactando positivamente en el sector», destacó Cepeda.
Para acceder a este mercado, los productores colombianos deberán cumplir con estrictos requisitos establecidos en el acuerdo sanitario bilateral entre ambos países. Estos requisitos incluyen el control de las materias primas, la procedencia de los animales, los tratamientos aplicados durante el proceso de elaboración y las características del producto final.
La apertura del mercado chileno no solo representa un importante paso para la industria porcina colombiana, sino que también fortalece su presencia internacional. Las tripas saladas de cerdo colombianas ya se exportan a otros mercados como Paraguay, Uruguay y Hong Kong.
